Tema 4. La Corona de Castilla

En el siglo XIII los reinos de Castilla y León se unen de manera definitiva, naciendo así la Corona de Castilla. A partir de ese momento la corona de Castilla se convierte en el mayor reino de la península y con gran protagonismo en la expansión de los reinos cristianos hacia el sur.

autor: Alexandre Vigo

El gobierno del reino

El gobierno se fundamentaba en tres instituciones: la monarquía, las Cortes y los municipios.

• La monarquía

El rey en Castilla disfruta de más poderes que otros reyes peninsulares y aunque compartía el poder con los grandes nobles podía crear ejércitos y  declarar la guerra, dictar nuevas leyes, recaudar impuestos e impartir justicia. El rey se rodeaba de un grupo de personas que formaban la corte.
Para afianzar su poder se crearon a partir del siglo XIV la Audiencia (o tribunal de justicia) y el Consejo Real (órgano asesor del monarca).

Alfonso X el Sabio rey de Castilla y de León -S.XIII-
(imagen del Libro de los Juegos del s. XIII)

• Las Cortes

Las Cortes castellanas reunían a la nobleza, el clero y los representantes de las ciudades. Su función principal era discutir y votar los impuestos (subsidios) solicitados por el monarca y aprobar las leyes propuestas por el monarca. No tenía capacidad de elaborar leyes. Las Cortes las convocaba el rey y no tenían sede fija, el rey elegía la ciudad donde se desarrollaban. Durante los siglos XII y XIII hubo cortes diferenciadas en el reino de León y en el de Castilla. A  partir del siglo XIII se celebran en la misma ciudad, y a partir del reinado de los RRCC se denominan simplemente Cortes de Castilla. Se disolvían una vez tratados los asuntos correspondientes.
A menudo la nobleza, el clero y los representantes de las ciudades presentaban sus quejas y peticiones al rey, que debía concederlas o negarlas antes de la aprobación de los subsidios.

Fernando IV de Castilla es presentado en las Coretes de Valladolid  de 1295

• Los municipios

Al tiempo que crecía el poder económico de las ciudades, también va creciendo la importancia de la administración municipal.
El órgano municipal más importante en la Corona de Castilla era el concejo, que en un principio incluía a todos los vecinos, pero el gobierno recaía en los regidores, que  junto a los alcaldes y jueces formaban los ayuntamientos.
Estos concejos estaban controlados en numerosas ocasiones por la pequeña nobleza o por los burgueses enriquecidos.
Para controlar este poder de los nobles y burgueses en los concejos, a partir del siglo XIV la monarquía nombró representantes en el gobierno municipal: los corregidores.

La economía castellana

La mayor parte de la población se dedicaba a la agricultura basada fundamentalmente en el cultivo de  la vid, el olivo y los cereales.

El clima extremo de Castilla favoreció el desarrollo de la ganadería ovina de raza merina. Las grandes extensiones ocupadas durante la expansión eran ideales para el desarrollo de esta oveja que producía una lana de una calidad excepcional.

Los rebaños de ovejas realizaban la trashumancia a través de unos caminos conocidos como cañadas: en verano se dirigían al norte para pastar en los prados de la Cordillera Cantábrica. y en invierno se trasladaban hacia el sur.

Los grandes rebaños eran propiedad de la nobleza, de las órdenes militares y de los grandes monasterios. Para proteger sus intereses y organizar la trashumancia los monarcas crearon (s. XIII) el Honrado Concejo de la Mesta.  (video).

La mayoría de la lana obtenida se exportaba hacia el Norte de Europa. El comercio se concentraba en Burgos y desde allí se trasladaba hacia los puertos del Norte (Santander, Laredo, San Vicente de la Barquera, y Castro Urdiales). Su destino final era Flandes, donde existía una rica industria textil.

La exportación de lana era un negocio muy lucrativo para la nobleza. Esto dificultó el desarrollo de las manufacturas castellanas de tejidos y obstaculizó el desarrollo de una burguesía enriquecida con el comercio textil que actuase de contrapeso de la nobleza castellana.

Las ferias.
Este comercio de la lana reactivó el comercio en la Meseta Norte, donde se crearon importantes ferias como la de Valladolid o Medina del Campo. En estas ferias, al principio se negociaba con la compraventa de ganado, pero según transcurrió el tiempo el comercio se amplió a otros productos como la lana, el vino, aceite etc.